viernes, 30 de diciembre de 2011

Argentina: Esquel, Viedma y Famatina, en lucha contra la minería

Corren tiempos nuevos en los procesos de resistencia que se desenvuelven en la diversa y compleja geografía argentina. Ya lo dijo aquí Horacio Machado Aráoz, licenciado en Ciencia Política y profesor de la Universidad Nacional de Catamarca (UNC), la década del '90 engendró un nuevo sujeto político: las asambleas de vecinos autoconvocados (AVA).  Son la cifra que desencripta la silenciada lucha en pos de defender los bienes naturales.   

Machado Aráoz sentenció porqué la autonominación de vecinos: "la palabra vecino hace referencia a una red de vínculos de la gente con el territorio y entre la gente de ese territorio. Es un hábitat que tiene su historia y tiene su densidad en términos de las relaciones económicas, políticas y culturales que se construyen en el lugar, y esto es lo que se ve afectado". 

El avance de la megaminería en La Rioja, Río Negro y Neuquén creó las condiciones para la conformación de AVA, que se oponen a esta actividad extractiva. Portan un enunciado contundente y unificador: "Sí a la vida".    

México: La actividad minera amenaza un cuarto del territorio nacional

Angélica Enciso L.
Periódico La Jornada

Actividad minera, veta de desastre ambiental

Destrucción de flora y fauna, uso intensivo de agua, producción de toneladas de residuos peligrosos y daños a comunidades por la contaminación de aire y suelo, así como acústica, son consecuencias de la minería a cielo abierto y la megaminería subterránea que se extiende en territorio nacional.

- En gran parte del país, pero sobre todo en Chihuahua, Michoacán, Zacatecas, Durango, Sonora, Coahuila, Guanajuato, San Luis Potosí, Hidalgo, Sinaloa, Colima y Jalisco, "la actividad minera ha generado por décadas gran cantidad de desechos" y contaminación, señala el Instituto Nacional de Ecología en el estudio Tecnología de remediación para sitios contaminados.

Apunta que, en general, todas las etapas de un proceso minero, con excepción de la prospección (estudios preliminares), causan problemas ambientales de alto impacto.

En las fases de exploración, explotación, beneficio, fundición y refinación se generan aguas residuales, desechos peligrosos y emisiones a la atmósfera. Aun con esos efectos, esa actividad se expande y ya amenaza alrededor de una cuarta parte del suelo nacional.

Tan sólo la compañía número uno en producción de oro en México, Goldcorp, tiene una clausura preventiva impuesta por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) sobre Peñasquito, una de sus minas, donde debe "regular sus procesos para evitar afectación ambiental", informó el organismo.

La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) tiene ubicados al menos dos sitios donde es urgente atender los pasivos ambientales (contaminación que representa un riesgo ambiental y para la salud de la población). Se trata de jales (residuos) de la mina Pilares, en Nacozari de García, Sonora, y las minas Nuevo Mercurio, en Mazapil, Zacatecas, que operaron durante el siglo pasado.

La actual devastación de territorios es consecuencia de que el oro ya no está en vetas, sino disperso, y en bajas concentraciones. Ha proliferado la técnica de tajo a cielo abierto, con la cual se extrae medio gramo de metal de una tonelada de tierra. "El problema es que para obtenerlo se destruye el territorio", puntualiza Juan Carlos Ruiz Guadalajara, investigador de El Colegio de San Luis.

Tierra Sublevada. Oro Impuro

En este documental, Pino Solanas, denuncia a las políticas neoliberales de los ’90 que propiciaron la depredación de los metales e hidrocarburos del país. Las grandes corporaciones contaron, por entonces, con el permiso (explícito e implícito) del Estado para utilizar sustancias tóxicas y extraer las riquezas mientras contaminaban el agua y el medio ambiente. Pese a la retórica del gobierno actual, la realidad no ha cambiado. Combina las denuncias de corrupción y complicidades con la presentación de la lucha de aquellos que resisten. Las asambleas de los ambientalistas y los cortes de ruta organizados por los vecinos autoconvocados, por lo tanto, tienen su lugar en Tierra sublevada, oro impuro.

lunes, 26 de diciembre de 2011

El oro negro de Turmequé

Dipeza y Valbuena Asociados planea explotar 76.800 toneladas de carbón al año. Los habitantes del municipio boyacense temen un fuerte impacto ambiental.
El 10 de noviembre se reunieron los habitantes de Turmequé y Villapinzón para exponer sus inconformidades frente al proyecto minero

Turmequé no recibe al viajante a la manera de cualquier pueblo. Bienvenidos a Turmequé. Disfrute su estadía. Que su paso por aquí sea grato. Nada de eso. En cambio, Turmequé tiene pintada, en la primera casa del pueblo, una variación de una obra de René Magritte: Ceci n’est pas une pipe. Pero en vez de una pipa en detalle, hay un tejo. Y en letra cursiva —la misma de la obra del francés— dice “Ceci n’est pas une tejo”: “Esto no es un tejo”.
Esto no es, tampoco, un pueblo minero. Turmequé es una villa de hombres y mujeres de mejillas peladas, sombreros de toda suerte y camisas apuntadas a cuello cerrado, agitando el dedo índice y vociferando: “Turmequé no es —no es— un pueblo minero”.
Es la audiencia pública citada por la corporación regional Corpochivor para socializar la propuesta de explotación minera de la empresa Dipeza y Valbuena Asociados. Hay cerca de 200 personas elevando las gargantas de tanto en tanto, farfullando. Vienen de las veredas y pueblos próximos. Están, en general, molestos. Dicen que nadie los consultó, que todo se hizo a escondidas. Que abrir a pico y pala la tierra dañaría las aguas que bajan del páramo de Guacheneque, madre del río Bogotá.
En 2007, Ingeominas concedió un título minero a Mayeni Lisbeth Valbuena Ávila y José Vicente Pinzón Ariza en la zona entre Turmequé y Villapinzón (Cundinamarca). Poco después, Valbuena se asoció con Dipeza, una empresa dirigida por Enrique Zapata Parga. Para iniciar los trabajos de explotación, Dipeza debía hacer primero un estudio de impacto ambiental —bajo un proceso de exploración que puede durar hasta seis años— que luego sería revisado por Corpochivor.
Ahora está en manos de esta entidad decidir si Dipeza puede o no extraer, bajo tierra y durante 28 años, 6.400 toneladas de carbón mensuales de las entrañas de Turmequé.

jueves, 22 de diciembre de 2011

El agua y las consecuencias de las locomotoras de desarrollo

Durante el Encuentro Internacional Agua y Economía, que tuvo lugar en octubre en la Biblioteca Luis Ángel Arango, expertos nacionales e internacionales debatieron las principales problemáticas económicas y socioecológicas relacionadas con el agua, considerado como recurso. De este modo, los libros recomendados enmarcan los diversos temas debatidos como la gobernanza del agua, la lucha campesina y los movimientos sociales emergentes alrededor del conflicto generado por la mala distribución y gestión del agua. Así mismo, se presentaron soluciones innovadoras, como la propuesta por el economista y administrador de negocios Gunter Pauli, de quien recomendamos su más reciente obra La Economía Azul.

Todos los videos del Encuentro AQUI 

El agua y las consecuencias de las locomotoras de desarrollo
JULIO FIERRO


VÍCTOR NEGRET

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Energía nuclear en Chile de la mano de la expansión minera transnacional

 
- Un estudio publicado en Diciembre del 2009, encargado por el gobierno de Michelle Bachelet a Tironi y Asociados (1), agencia de comunicación estratégica favorita de los gobiernos de la concertación y de las transnacionales extractivistas, arrojó que una clara mayoría ciudadana en Chile considera que la energía nuclear es muy cara (83%) y ambientalmente dañina (69%). Ya en el comienzo señala "la imagen de la energía nuclear movilizada por los participantes es sistemáticamente negativa, por sobre cualquier diferencia socioeconómica, de género o edad. "Muerte", "destrucción", "bomba", "Chernobyl", "sucia" y "guerra" fueron algunos de los conceptos que aparecieron con mayor frecuencia en los discursos."

Estos estudios no fueron difundidos, pues su objetivo no era dar insumos a la opinión pública para debatir seriamente un negocio que desde el 2005 se viene amasando entre las principales fortunas nacionales, el lobby minero y las autoridades de turno. Más bien, todo parece indicar que la idea era tener claridad de qué terreno se pisa en la materia para definir qué estrategias comunicacionales implementar para cambiar la percepción ciudadana e imponer la impronta de una energía limpia y barata. 

De hecho, luego del desastre de Fukushima, a menos de una semana de la tragedia, el gobierno de Piñera suscribió con Estados Unidos acuerdos de cooperación nuclear un día antes de la visita de Barak Obama a Santiago, visita que se manejó como si el mandatario fuera un artista de Hollywood, con una cobertura escandalosamente superficial, que imposibilitó que la ciudadanía se enterara de los verdaderos propósitos de la cita. 

Este mismo desenfado para abordar la energía nuclear, caracterizó a Michelle Bachelet, la primera mujer presidenta de Chile, militante del partido socialista y concertacionista, que había hecho un compromiso de campaña expreso de "no incluir la opción nuclear en la política energética nacional"(2), pero que paradójicamente contrató estudios para dar los primeros pasos en una normativa chilena sobre la energía nuclear (siguiendo lo que había comenzado el también socialista Ricardo Lagos) y creó el "Grupo de Trabajo para una primera evaluación la opción Núcleo-Eléctrica en Chile". El grupo fue prolífico, desde el 2008 fue evacuando los informes 'Rol del Estado y los privados' (2008), 'Adecuación de normativas' (2009), 'Impactos y riesgos' (2009), 'Programa de comunicaciones' (2009), y 'Localización de plantas' (2011). Por supuesto que una vez más estos informes no fueron difundidos entre la ciudadanía, pero sí dieron insumos, por ejemplo, para que en las plantas nucleares de Japón, semanas antes del desastre, el ministro de Energía chileno firmara acuerdos de cooperación con Francia para investigación y capacitación, y creara un Consejo empresarial de colaboración en energía nuclear, encabezado por Guillermo Luksic del grupo Quiñenco y el presidente del grupo energético franco-belga GDF Suez, Gérard Mestrallet. Es decir, con el apoyo transversal de la clase política, y la oposición documentada de la sociedad civil, en la última década se vienen desarrollando todos los instrumentos y acuerdos para la instalación de una alternativa energética en retirada de los países que antaño fueron sus férreos partidarios.

Peru: Extractivismo y alternativas de/al desarrollo

  "El principal ataque son las minas a cielo abierto, que con explosivos derrumban montañas para extraer metales usando cianuro y otras sustancias químicas venenosas, envenenan el agua matando personas, animales y vegetales. Son mucho más destructoras del medio ambiente que las antiguas minas de socavón"

Nuestra cultura agrícola
 
El Tawantinsuyo no fue más que la última etapa de una larga, milenaria y fructífera historia de cultura agrícola. Fuimos uno de los 8 centros mundiales de domesticación de plantas silvestres en plantas útiles, fundamentalmente alimenticias. Esto no fue casual, ni porque nuestros antepasados hayan sido más inteligentes que otros.

De las 104 zonas de vida del planeta, en nuestro territorio tenemos 84, solo nos faltan las zonas polares.

Compartimos la selva tropical más grande del mundo. Nuestro territorio está atravesado por la Cordillera Andina, la que para mayor fortuna nuestra está en dirección norte-sur y no este-oeste, lo que hace que el clima a 1,500 metros de altura cerca al ecuador sea más cálido que a la misma altura en el sur.

En la parte oriental de la cordillera llueve mucho, mientras la parte occidental es árida.

La costa árida contribuye con más microclimas.

El modelo minero a gran escala además de causar miseria atenta contra la democracia y los derechos humanos en América Latina

Entrevista con la socióloga argentina Maristella Svampa
 
En América Latina se viene ejecutando una segunda fase del criminal modelo neoliberal que tantos perjuicios económicos, sociales y políticos generó a la región durante el último cuarto de siglo, mediante la puesta en marcha de lo que el presidente conservador colombiano Juan Manuel Santos ha dado en llamar la "locomotora minera” para significar unas supuestas "ventajas y oportunidades económicas”.

Este modelo conocido como extractivismo (explotación de los recursos naturales) tiene en la minería de cielo abierto, "la actividad más perversa en la medida en que muestra lo peor: desposesión y despojo descarnado, altos índices de contaminación del medio ambiente, aprovechamiento al máximo de los territorios objeto de explotación no dejando ganancias económicas para los países, y amenaza a la democracia y a los derechos humanos”, explica en forma categórica la socióloga e investigadora argentina Marsitella Svampa, principal referente hoy en día en Latinoamérica en este tema.

Svampa ha recorrido buen parte de la geografía latinoamericana para estudiar in situ la realidad socioeconómica de las comunidades afectadas por la explotación minera, lo que le ha permitido analizar en profundidad las múltiples consecuencias que esta actividad extractivista viene causando en la descomposición del tejido social y con ella la irrupción de conflictos sociales y políticos que, como bien señala, amenazan la estabilidad democrática y el respeto por los derechos humanos en la región.

En sus múltiples investigaciones, libros, ensayos y artículos periodísticos, esta científica social ha sido contundente en sus conclusiones al señalar que el modelo minero a cielo abierto que han adoptado varios gobiernos latinoamericanos ya sean de derecha, centroizquierda o izquierda, "no solo genera más conflicto social, sino que contribuye a la reprimerización de las economías latinoamericanas”. Lo grave, añade, es que "estamos consolidando enclaves de exportación que, lejos de generar desarrollo endógeno, producen más pobreza y desigualdad”.

martes, 20 de diciembre de 2011

Honduras: Pobladores del Valle de Siria exigen atención médica y justicia

Más de 62 habitantes del Valle de Siria han sido afectados por minera Gold Corp
TEGUCIGALPA.- Pobladores en compañía de ambientalistas se manifestaron ayer frente a las instalaciones del Ministerio Público (MP), exigiendo a la Fiscalía del Ambiente eficiencia ante los casos denunciados por personas afectadas por desechos minerales de una de las empresas que operaron en el Valle de Siria.
Más de 62 habitantes del Valle de Siria han sido afectados.
“Existen niños, mujeres y hombres que en sus organismos tienen minerales como arsénico, plomo y mercurio, tenemos que exigir justicia por lo que hace diez años la compañía Entremares con la extracción de oro, contaminó las aguas ambientales de la zona”, denunció el presidente del Comité Ambientalista del Valle de Siria, Roger Abrahám Escober.
Actualmente, tenemos pobladores y exempleados de la empresa enfermos con caída de cabellos, falta de visión, resquebrajamiento de sus huesos, entre otras enfermedades en su organismo a quienes no solo se les ha negado justicia; sino el derecho a atención médica, agregó.
“El Ministerio Público, Salud y la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente (Serna) saben de los niveles que por encima de la norma que tienen los pobladores de Siria con metales pesados en su organismo y no han sido dignos de atender a los pobladores a quienes por el contrario se han procesado con medidas cautelares en la zona de El Terrero”.
Escober manifestó que la situación es tal, que recientemente falleció una menor de edad a quien no se le dio atención médica por los metales que mantuvo en su cuerpo y el análisis hecho en Colombia lo demostró, pero ninguna autoridad se ha manifestado al respecto.
“Hay más de 27 pobladores afectados en su organismo por encima de la norma que representan solo una muestra representativa de 62 habitantes, particularmente niños que tomaron agua contaminada a quienes no se han dignado en atender ni durante operaba la empresa minera ni cuando esta cerró operaciones”, denunció.

Cambio Climático

Editorial revista Semillas N°  46/47 diciembre de 2011

Nuestro planeta enfrenta una crisis climática creciente, provocada por un modelo de desarrollo que destruye aguas, bosques, páramos, nevados y praderas; al tiempo que extrae descontroladamente el carbono fósil del subsuelo.
Todos los países, a escala diferente, tanto los llamados industrializados como aquellos con economías emergentes, son responsables de ello, dado que tal y como se mide el nivel de ‘desarrollo’ actual, es precisamente por la capacidad de explotación y agotamiento de los recursos naturales por parte de los países. Sin embargo, las consecuencias de este modelo desarrollista –y su impacto en el cambio climático y el equilibrio del planeta– los viven de manera más fuerte los países más pobres y vulnerables del Sur global, en donde, solo en 2010, unas 50 millones de personas se vieron desplazadas forzosamente de sus hogares por sequías, desertificación, erosión de los suelos, inundaciones, accidentes industriales y otras causas medioambientales.

Hemos querido dedicar este número al cambio climático, ya no como un tema de discusión de expertos y científicos, ajeno a nuestras vidas cotidianas, sino como una realidad que nos atañe cada vez más a todos los habitantes del planeta, y en particular, aquellos más directamente afectados por este fenómeno, como lo es Colombia, reportado por La ONU y el Banco Mundial como el tercer país de mayor riesgo climático en el mundo. Este número de la revista también busca ser un abrebocas para la próxima cumbre de la Tierra, Río+20, prevista para junio de 2012, la cual se espera sea una ocasión para plantear un modelo de desarrollo distinto, que garantice la equidad social y la reducción de los riesgos ambientales.

lunes, 19 de diciembre de 2011

ANGLO GOLD ASHANTI Y SU PROYECTO MINERO DE LA COLOSA




SI A LA VIDA, NO A LA MINA EN CAJAMARCA 



Proyecto Minero La Colosa, Cajamarca


En qué consiste el proyecto Minero La Colosa, Cajamarca

Eje Cafetero: Contra la minería a cielo abierto

Una lucha contra la minería a cielo abierto emprenderán las organizaciones defensoras del Paisaje Cultural Cafetero buscando preservar lo que es considerado por la Unesco, Patrimonio Cultural de la Humanidad, así lo hicieron saber en un reunión celebrada con el fin de gestionar la inclusión de una política de conservación enmarcada en los planes de ordenamiento territorial y planes de desarrollo de los 47 municipios que la integran.

“Tenemos un compromiso firmado con el presidente de la República para regular la actividad minera en Colombia, la que le pondrá límites a la exploración minera que se lleva en esta zona del Paisaje Cultural Cafetero, que esperamos comience a regir a partir de marzo del 2012” aseguró Óscar Arango, coordinador de Alma Mater, quien expresó que este tema genera temores e incertidumbre en la comunidad por la cantidad de licencias solicitadas ante el Ministerio de Minas y Energía.

Hoy se hará una socialización de la declaratoria del Paisaje Cultural Cafetero.

Una locomotora loca cargada de oro

Este es el tren de la Salvación?
Por Daniel Samper Pizano
Para decirlo en términos navideños, las multinacionales mineras son como los Reyes Magos, pero al revés: en vez de llevar oro al pobre portal, se lo quitan. El Gobierno habla con ingenua esperanza del "tren de la minería". Pero deberá manejarlo con cuidado, pues recuerda aquella locomotora loca que corre sin rumbo ni control y causa toda suerte de desastres.
Esta es la impresión que deja una mirada atenta a recientes debates en el Congreso, diversos documentos oficiales, graves quejas ecológicas y artículos de especialistas. Si no enderezan los rieles del tren minero, si no se le pone un buen maquinista y si no se establecen límites y barreras a la actividad, enfrentaremos un monstruo que destruirá la naturaleza, provocará peligrosos conflictos sociales y dejará escaso empleo y exiguas ganancias. No somos las únicas víctimas: en este momento hay en América Latina 155 conflictos creados por la explotación de yacimientos. En Colombia algunos han provocado desórdenes y asesinatos.

domingo, 18 de diciembre de 2011

3 de Enero: Paro Regional Indefinido

Representantes de la Asociación de Afectados por la Hidroeléctrica el Quimbo (Asoquimbo), anunciaron su respaldo a los problemas viales que se vienen presentando en la región. 
En este sentido, líderes de Asoquimbo anticiparon que el 3 de enero próximo tienen definida una gran manifestación de rechazo a las condiciones en las que se está desarrollando el proyecto hidroeléctrico, y en tal sentido dijeron que la movilización prevista para esa fecha no tendrá reversa, de ella esperan respuestas definitivas por parte del Gobierno a las múltiples peticiones que desde hace varios meses vienen elevando por las afectaciones que la construcción del Quimbo ha dejado en el área de influencia del proyecto.

Empresas y violaciones a los derechos humanos

Una guía sobre mecanismos de denuncia para víctimas y ONG
 La Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) tiene el placer de anunciar la publicación de la versión en español actualizada de su guía destinada a las víctimas y a las ONG, que recoge los mecanismos de recurso disponibles en el marco de las violaciones cometidas por empresas.

En todo el mundo es posible individuar violaciones de derechos humanos e identificar los impactos medioambientales relacionados, directa o indirectamente, con las actividades de las empresas. En América Latina, especialmente en Colombia, Guatemala y Honduras, dirigentes sindicaless o campesinos son asesinados por reivindicar públicamente sus derechos. En Filipinas, Perú o Ecuador, el derecho de los pueblos autóctonos a la consulta, sobre todo en el marco de proyectos de inversión vinculados a la industria extractiva, sigue siendo demasiado frecuentemente ignorado. 

sábado, 17 de diciembre de 2011

Límite a las privatizaciones

CÓMO FRENAR EL SAQUEO DE LOS BIENES COMUNES?

POR HUGO MATTEI* 

 

EN LE MONDE DIPLOMATIQUE

 

¿Cómo proteger la propiedad colectiva en un momento en que los gobiernos se deshacen de los servicios públicos y dilapidan los recursos naturales que heredaron, por ejemplo para “equilibrar” su presupuesto? La noción de “bienes comunes” propone superar la antinomia entre propiedad pública y propiedad privada.

uando un Estado privatiza una vía de ferrocarril, una línea de transporte aéreo o un hospital, cuando cede la distribución de agua potable o vende universidades, expropia a la comunidad de una parte de sus bienes; una expropiación simétrica a la que realiza sobre la propiedad privada cuando desea construir un camino o alguna otra obra pública. En un proceso de privatización, el gobierno vende algo que no le pertenece, sino que pertenece proporcionalmente a cada uno de los miembros de la comunidad, de la misma manera que cuando se apropia de un campo para construir una autopista, adquiere mediante la coerción una propiedad que no es suya. 

Es decir que toda privatización decidida por la autoridad pública –representada por el gobierno de turno– priva a cada ciudadano de su cuota de bien común, exactamente como en el caso de una expropiación de un bien privado. Pero con una diferencia importante: la tradición constitucional liberal protege al propietario privado del Estado constructor, instituyendo la indemnización por expropiación, mientras que ninguna disposición jurídica –y menos aún constitucional– ofrece ninguna protección cuando el Estado neoliberal traslada al sector privado los bienes de la colectividad.

viernes, 16 de diciembre de 2011

Explotación minera contra investigación científica

Los bateros del río Dagua compiten con la minería intensiva, que cuenta con maquinaria. La destrucción ecológica del cuerpo de agua es la consecuencia directa de la falta de controles serios a la explotación minera. - AFP
Los bateros del río Dagua compiten con la minería intensiva, que cuenta con maquinaria. La destrucción ecológica del cuerpo de agua es la consecuencia directa de la falta de controles serios a la explotación minera. - AFP
Gary Stiles, en plena acción científica en los campos colombianos. - Cortesía Julio Betancourt, Instituto de Ciencias Naturales UN
Gary Stiles, en plena acción científica en los campos colombianos. - Cortesía Julio Betancourt, Instituto de Ciencias Naturales UN
Fuente: Ministerio de Medio Ambiente
Fuente: Ministerio de Medio Ambiente
En Colombia desarrollar un proyecto de investigación para acceder a recursos genéticos cuesta $ 200 millones o más, y hay que esperar casi cinco años para que se apruebe. En cambio para minería los tiempos son apenas de tres meses y los requisitos son mínimos. En los últimos 15 años se han otorgado 46 licencias científicas, mientras en 8 años se firmaron 7.800 contratos mineros.
Colombia es una tierra contradictoria. Mientras se le imponen trabas burocráticas y descabelladas a las tareas de investigación científica, que son la puerta de entrada al descubrimiento de curas para enfermedades, con base en los principios activos de las plantas, o el hallazgo de especies nunca antes vistas, las dragas mineras destruyen esa riqueza de la que se ufana el país.
Los permisos expeditos y requisitos fáciles que se dan a medianas y grandes multinacionales extractivas -según denuncias de los pequeños mineros- hacen preguntarse, ¿en qué país vivimos? Ejemplos hay a granel; uno de los que debería dar vergüenza nacional es la destrucción del río Dagua, en el Valle del Cauca, que incluso se usa mundialmente como la radiografía de la ambición humana por encima de la naturaleza y del futuro.
Durante 11 meses, el hermoso torrente de agua fue atracado por 490 excavadoras y dragas que arrasaron con el lecho del río y la vegetación aledaña. Unos 9.000 mineros, desesperados por la fiebre del oro, montaron tiendas, ventas de ropa, minutos a celulares, burdeles y cantinas a lo largo de 20 kilómetros.

El caos llegó a tal situación que la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca e Ingeominas tuvieron que desalojar el sitio en el 2009. Sin embargo, el daño era irreversible, como lo demuestran las tomas aéreas, que dan la sensación de que todo el entorno sufrió un bombardeo por los cráteres que quedaron. Pese al desalojo, aún se ven dragas y mineros. 


La otra cara 
Parece que el Estado no tiene "dientes", recursos ni voluntad para evitar catástrofes ambientales como las del río Dagua, pero sí para restringir el trabajo de los científicos. La profesora Gloria Galeano, del Instituto de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de Colombia, que lidera una propuesta para investigar las palmas del país, ha tenido que armarse de paciencia. El trámite para el permiso durará cerca de tres años y medio y requerirá una inversión previa de $ 229 millones, con el fin de cumplir los requisitos legales a la hora de tener acceso a material genético con fines científicos.